Desde la piel crujiente hasta los sabores morunos, el pollo asado es una receta clásica que cualquiera puede dominar fácilmente. El pollo asado es perfecto para una cena familiar de los domingos o una celebración a la hora de comer. Lo mejor de todo es que el pollo asado es increíblemente versátil: aliñado con hierbas, especias y marinadas, se adapta a casi cualquier estilo de cocina. Aquí tienes algunas deliciosas recetas de pollo asado, junto con algunos consejos y trucos que te ayudarán a convertirte en un gran asador casero.
Pollo asado clásico
El pollo asado clásico es siempre delicioso, pero esta receta es bastante sencilla. Empieza con un pollo entero lavado y secado. Unta el exterior y el interior con aceite de oliva suave, y sazónalo generosamente con sal y pimienta. Levanta la piel del pecho y rellénala con mantequilla y tomillo. A 220º C, unos 20 minutos por libra. deja que repose unos 15 minutos antes de servirlo.
Pollo asado a la mostaza y miel
Esta receta de pollo asado es increíblemente sabrosa y fácil de preparar. Comienza con un pollo entero lavado y seco. Haz una marinada con miel, mostaza de Dijon, vinagre de vino blanco, aceite de oliva suave, sal y pimienta. Vierte la marinada sobre el pollo y déjala reposar durante al menos 2-3 horas, o mejor toda la noche. A 220º C, unos 20 minutos por libra. deja que repose unos 15 minutos antes de servirlo.
Pollo asado al horno
Asar un pollo asado lo mantiene increíblemente jugoso y sabroso. Empieza con un pollo entero lavado y seco. Unta el exterior y el interior con aceite de oliva suave, y sazónalo generosamente con sal y pimienta. Añade cebollas, zanahorias y apio picados a una fuente para asar, junto con unas ramitas de tomillo y romero. Sazona las verduras con sal y pimienta. Coloca el pollo en la bandeja y cúbrelo con papel de aluminio. A 175º C, durante unas 2-3 horas; deja que se ase unos 15-20 minutos más, hasta que la piel esté dorada.
Consejos y trucos para un pollo asado estupendo
El pollo asado puede resultar intimidante para algunos cocineros caseros, pero hay algunos consejos y trucos sencillos que debes tener en cuenta. Cuando ase un pollo entero, asegúrate siempre de retirar primero el contenido de la cavidad. A continuación, sécalo a fondo con toallas de papel para que la piel quede crujiente. Utiliza un aceite de oliva suave de buena calidad, así como mucha sal y pimienta para sazonar el pollo antes de cocinarlo. Para darle un sabor ahumado extra, añade algunas ramitas de romero, tomillo o pimentón ahumado al pollo. Utiliza siempre un termómetro de cocina para comprobar el punto de cocción, ya que el pollo demasiado cocido estará duro y seco. Deja reposar el pollo unos 15 minutos antes de cortarlo y servirlo, ya que así los jugos se redistribuyen uniformemente.
Conclusión
El pollo asado es una estupenda cena familiar, y puede adaptarse fácilmente a casi cualquier estilo de cocina. Prueba algunas de estas deliciosas recetas y utiliza los consejos y trucos anteriores para convertirte en un gran asador casero. Disfruta de tus deliciosos pollos asados.