¿Quieres preparar un postre dulce, delicioso y fácil? Entonces ya lo tienes. Las galletas caseras de mantequilla son la forma perfecta de terminar una comida o de darte un capricho en cualquier momento. Son fáciles de hacer y tienen un sabor delicioso. Esta sencilla receta sólo requiere unos pocos ingredientes y tendrás un delicioso capricho casero en muy poco tiempo.
Ingredientes:
2 tazas de harina para todo uso
1 taza de azúcar glas
1 taza de mantequilla sin sal, ablandada
1 cucharadita de extracto de vainilla
1 pizca de sal
Instrucciones:
1. Precalentar el horno a 375 grados F (190 grados C)
2. En un bol grande, mezclar la harina y la sal. Reservar.3. En otro bol, batir la mantequilla y el azúcar hasta que estén claros y esponjosos.
4. Añadir el extracto de vainilla y batir hasta que esté bien mezclado.
5. Añadir poco a poco la mezcla de harina y mezclar hasta formar una masa.
6. Formar bolas de masa de 1 pulgada y colocarlas en bandejas para hornear sin engrasar.
7. Aplastar cada bola con los dientes de un tenedor para crear un patrón enrejado (opcional)
8. Hornear de 8 a 10 minutos o hasta que los bordes estén ligeramente dorados.
9. Sacar del horno y dejar enfriar 2 minutos antes de transferir las galletas a una rejilla para enfriarlas por completo.
Consejos para unas galletas de mantequilla perfectas:
Utiliza mantequilla a temperatura ambiente.
Sacar del horno y dejar enfriar 2 minutos antes de transferir las galletas a una rejilla para enfriarlas. – Utiliza mantequilla a temperatura ambiente. Así será más fácil mezclarla con el azúcar y dará a las galletas una mejor textura.
Añade una variedad de sabores. Prueba a añadir un toque de canela, ralladura de cítricos o incluso algunos frutos secos a la masa para darle un sabor extra.
Utiliza un temporizador. Es fácil pasarse de horneado con las galletas, así que utiliza un temporizador para asegurarte de que salen perfectas.
No omitas la sal. El sal es lo que equilibra la dulzura y realza el sabor de las galletas.
Sugerencias para servir:
Una vez que las galletas de mantequilla caseras se hayan enfriado, las posibilidades son infinitas para servirlas. Disfrútalas con una taza de café o té por la tarde, o prepara un sencillo sándwich de helado colocando una bola de tu helado favorito entre dos galletas. Incluso podrías desmenuzarlas y utilizarlas como cobertura de tu postre favorito.
Conclusión:
Las galletas de mantequilla caseras son el postre perfecto para terminar cualquier comida o para disfrutar en cualquier momento. La receta es sencilla y sólo requiere unos pocos ingredientes. Y una vez hecha una tanda, las opciones de presentación son casi infinitas. Así que ponte manos a la obra y empieza a hornear estas deliciosas galletas de mantequilla ahora mismo.