Comer pasta es un hábito obligatorio para muchos en todo el mundo. Es un alimento versátil que se puede degustar con cualquier tipo de salsa, y también es bastante práctico de preparar con un presupuesto ajustado. Hoy te traemos una receta de pasta con limón, ideal para esos momentos en los que quieres sorprender en la cocina con algo diferente.
La pasta al limón es fresca y vigorizante. Su sabor cremoso y su delicado aroma son perfectos para cualquier época del año. También es un plato ideal para vegetarianos, ya que no contiene productos animales. A continuación te contamos todo lo que necesitas saber para prepararlo de forma sencilla y deliciosa.
Ingredientes
500gm de pasta;
500ml de nata líquida;
1 limón sin cera;
2 dientes de ajo;
1 cebolla;
un poco de aceite de oliva;
pimienta negra molida al gusto;
sal al gusto.
Preparación
Para empezar, cuece la pasta en agua hirviendo con sal. Mientras se cuece la pasta, ralla la piel del limón con un rallador fino. Procura no rallar la parte blanca, que es amarga. Exprime el zumo del limón en un cuenco, quitando las pepitas si es necesario.
En una sartén, calienta un poco de aceite de oliva y añade la cebolla, finamente picada. Pon el fuego a temperatura media y saltea la cebolla hasta que esté transparente. A continuación, añade el ajo finamente picado y saltéalo durante 2 minutos.
Cuando la pasta esté al dente, escúrrela y resérvala. En la misma olla, añade la nata, la mitad de la ralladura de limón y la mitad del zumo de limón. Remueve bien a fuego medio hasta que la salsa esté suave y espesa.
Ensamblaje
Añade la cebolla y el ajo a la salsa y mezcla bien. Apaga el fuego y añade la pasta. Remueve bien para que todos los ingredientes se mezclen. Sazona con sal y pimienta al gusto.
Sirve la pasta con limón en un plato o en cuencos individuales. Espolvorea la ralladura de limón restante y el resto del zumo de limón por encima. ¡Y listo! Ahora tienes un exquisito y refrescante plato de pasta para disfrutar en familia o con los amigos.
Variantes
Si quieres dar un sabor aún más potente a este plato, puedes añadir unas hojas de rúcula fresca. Hará que la pasta sea aún más deliciosa.
Por último, también puedes añadir un poco de queso parmesano rallado al servirlo. Este queso combinará perfectamente con el salteado de limón y cebolla y ajo.